Los musulmanes no se integran en la cultura occidental. Como ejemplo, Disneylandia que ha sido llevada ante la Justicia por prohibir usar el velo islámico a una de sus empleadas. La denuncia la presentó la propia radical, una joven de origen marroquí que trabaja desde hace 2 años como anfitriona en un restaurante del famoso parque californiano y que obtuvo la nacionalidad estadounidense hace 2 meses.Según cuenta, sus jefes le dijeron que podían proporcionarle “un gorro o algo” así si quería seguir trabajando de cara a los clientes. “Yo estaba alucinada”, añade. “¿Qué quieren decir con un gorro o algo así? Déjenme usar mi velo. Entonces me dijeron que mis opciones eran trabajar con el velo donde nadie me viera o irme a casa”.
Una portavoz del parque se defiende alegando que Disneylandia tiene un largo historial de lucha contra la discriminación y que sigue trabajando para dar acomodo a la solicitud de su empleada.
La comunidad islámica está en el ojo del huracán en Estados Unidos debido al polémico proyecto de construcción de una mezquita junto a la zona cero.
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